martes, 30 de abril de 2019

MONTAÑA RUSA

Pensaba en la antítesis entre la luz del sol y la luna, entre la temperatura diurna y nocturna;
la diferencia entre primavera donde todo florece y el otoño donde debe caer para volver a resurgir.

Meditaba en los cambios que se producen a diario en ideales y compromisos
en promesas de futuro y miradas al pasado
en como las circunstancias giran como si fuera una noria...a veces hasta el infinito, otras veces, a un punto de no retorno.

El amor...el desamor
la fortaleza...la debilidad
la velocidad con que vivimos las cosas...la pausa necesaria para vivirlas...

En cada una de las mañanas que nos levantamos, el contraste entre el día y la noche puede ser un reflejo de lo efímero de la estabilidad y el equilibrio en nuestras vidas, que, en un instante, puede variar y modificar nuestros planes para siempre.

Filosofaba sobre el vértigo con que suceden las cosas...
y la necesaria capacidad de reflexión para analizarlas

¿ has hecho tu lista?



CURIOSIDADES DE CERCANIA