En estas últimas fechas dentro del abanico de posibilidades y de emociones que conforman la vida, a mucha gente le tocó la óptica de colores grisáceos y oscuros que hacen que la primavera parezca invierno y se sienta una sensación gélida en la mente. Y le tocó por distintas circunstancias personales agudizadas por el covid y las consecuencias que ello trajo por el alcance de sus tentáculos.
Y personalmente me incluyo por despedidas a las que tuve que hacer frente...de frente.
Nada más desgarrador que cuando no está de nuestra mano poner remedio a esa separación,
pero la gama de colores girará en nuestra paleta de pintor para mezclar los colores y convertirlos en alegres y de esperanza...
Lo realmente importante no es la agudeza visual con la que seamos capaces de enfocar, visualizar e interiorizar los colores, sino que como decía El Principito:
"sólo con el corazón se puede ver bien. Lo esencial es invisible a los ojos"
Tal vez debamos centrarnos menos en agudizar la vista...dejar que pasen los nubarrones y dedicar esfuerzos en empapar el corazón de colores !!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Puedes hacerme llegar tus comentarios. Los leeré con atención, pero nunca serán publicados. Gracias por compartir tus sugerencias